jueves, 30 de marzo de 2017

Terrorismo Tropical

Siempre nos mentimos
Bestias estomacales despiertan
Cada vez que te veo entrar al salón
Nunca supe lo que pasó

Estamos engañados, un poco enviciados
Acuarelas japonesas
Y un soundtrack malgastado
Para acompañar

Porque verde es la debilidad
Y rojo es el vino
E inaudible el grito
Que te va a perforar los oídos

Y  si soñé con vos, no fue porque lo pedí
Es por que no tuve otra opción
Sos una máquina de Rube Goldberg
La  pereza de alguien que no se quiere marchar

Si  los problemas aparecen en la lluvia
Los gritos desaparecen en las sabanas
Y no lo podés notar, pero estoy sonriendo
Aunque cada mañana tome un vaso de veneno

Nadie es responsable de esta apatía
Cae lluvia en Febrero
Y aun seguís insistiendo que nada está mal
Que pase lo que no tenga que pasar
Esta conversación está muerta
Al igual que tu cabeza
Necesitamos un poco menos de ruido
Y otra dosis de inseguridad

Creo que ahora a mí también
La vida solo me entretiene
Y si sonrío no es por felicidad
Es solo que ya no me va tan mal

Que tan nítido se ve todo
Cuando apartas la mirada
Cuando el cuerpo duerme poco
La mente se pone inquieta

Celebramos la vida que se nos escapa
Brindamos por la angustia que nos sonríe
No importa no llegar a la meta
Casi nadie lo puede lograr

Todo queda tan claro
Nítido, transparente
No hay secretos por ocultar
Ni intenciones que descifrar

Somos desconocidos
Que se vuelven amigos
Porque la tregua siempre cae bien
Falsas alarmas de seguridad
Es tan brillante y hermoso todo
Que son naturales las ganas de vomitar
Ojos que pasan sobre estimulados
Sin importar a donde quieran mirar

Nos seguimos encontrando
Porque así lo dictó lo predecible
Te conseguiste una casa cerca de la salida
Para no malgastar el tiempo

Bolsas repletas de aire
Apunto de estallar
Es como una avalancha
sobre nuestras cabezas

lunes, 27 de marzo de 2017

Moringa

No vamos a seguirle hablando
A gente que no quiere estar con nosotros
El tiempo es muy valioso
Como para sentir frío en los ojos

Y ahora que estamos acostumbrados
Las necedades comienzan a llegar

Apaleado por ráfagas de nostalgia
Que no me van a llevar a nada
Es como si una crisis existencial
de lunes por la mañana
hubiera decidido quedarse para siempre
fastidiando a los vecinos
envenenando a los perros del barrio

La vida que perdimos
Se exhibe a la salida
Ese brillante futuro
Lleno de autorizaciones

La vida se puso creativa
Descubrió nuevas humillaciones
Departamento de quejas
Incomodidad injustificada
Espiral de auto desprecio
Consolidada en la almohada

Tantas benditas complicaciones
Para al final terminar muertos
Cuadritos llenos de mosquitos
Que aprendieron a cagar dinero

Manos vacías
Tan insaciable, tan paranoide
Tanto ruido
Tan poco dadaísmo

Por supuesto que puedo quedarme
Siempre haciendo lo correcto
Solo se vive una vez
Pero la ética de trabajo está primero